UN MARTIR POR LA JUSTICIA

EZEQUIEL NOLASCO CAMPOS, UN MARTIR POR LA JUSTICIA

El ex consejero regional de Ancash, Sr.  Ezequiel Nolasco, fue cruelmente asesinado el 14 de marzo del 2014  al filo de la media noche en una tienda del ovalo de la ciudad de Huacho, cuando regresaba de Lima después de haber cumplido una diligencia en el Tribunal Constitucional. De esta manera sus esbirros habían consumado este execrable acto mil veces anunciado contra un hombre valiente y corajudo que se atrevió a denunciar los actos de corrupción del gobierno de la región Ancash, presidido por el Sr. César Álvarez Aguilar.

Ya había sufrido un atentado contra su vida el 20 de julio del 2010, donde mataron a su hijastro por defenderlo y  él quedó mal herido, pero finalmente salvó la vida. A pesar de ello y de las continuas amenazas de muerte subsiguientes, siguió incansable su lucha en búsqueda de justicia. Luchó de manera valiente y  tesonera contra todo un sistema corrupto, donde, según se sabe ahora, están coludidos funcionarios públicos, policías, jueces, periodistas y hasta algunos congresistas. A lo largo de cerca de 4 años, acudió a todas las instancias del poder regional y nacional para hacer llegar sus denuncias, pero nadie lo escuchó. Al contrario, fue judicializado, desprestigiado, maltratado y amedrentado él y su familia. “Cuando yo muera se va a saber la verdad”, le habría dicho a su hija Fiorella Nolasco, pocos días antes de morir.

Hoy, después de 2 meses de su muerte, en que finalmente el presidente regional de Ancash ha sido apresado para ser juzgado junto a otros 30 implicados, al parecer sus palabras premonitorias se están cumpliendo… y ojalá se llegue hasta el final, como quisiera este twitero chimbotano: “César Alvarez, desde aquí te lo digo: Cambio Puente te está esperando, allí pasarás tus días junto con todos esos sicarios que tú mismo pagabas y mandabas. El pueblo chimbotano ya despertó, podrás comprar periodistas, jueces, fiscales policías…, pero no puedes comprar la dignidad de la mayoría de chimbotanos que ya abrimos los ojos y desde aquí te decimos se acabó, LA CORRUPCION SE ACABO”.

Hasta la fecha, poco se sabe sobre la vida de este ilustre chimbotano, pero su ejemplo de valentía, coraje y  perseverancia en búsqueda de justicia hasta el último momento de su vida, ya ha quedado impregnado e inmortalizado en la memoria de la juventud Ancashina y en la memoria de todo hombre y mujer honestos de este país. Testimonios y  ejemplos de vida como la del del Sr. Nolasco, nos hacen sentir que en nuestra patria no todo está perdido y que su muerte no ha sido en vano. Su nombre ya ha quedado grabado a fuego en nuestra memoria y corazones como un mártir de nuestros tiempos, un mártir por la justicia, un  héroe civil que conscientemente dio su  vida porque se desbroce el enmarañado camino de la corrupción en nuestro país y se abra paso a nuevos caminos de paz y convivencia democrática.